martes, 8 de marzo de 2011

Escuela nueva

La escuela nueva, (1921)

La escuela es un laboratorio de educación experimental. Es aquí cuando empezamos a hablar de los kindergarten, los cuales se fundaron en Inglaterra; los padres estaban trabajando en las fábricas y necesitaban lugares donde tener a su hijos. La escuela tiene un sentido experimental recuperan el pensamiento de Locke, Descartes...

Características:

-Se fomenta el trabajo libre en equipo es muy importante que los niños se socialicen y trabajen en grupos. Se distribuye a los alumnos en grupos de edad.

-Las escuelas deben estar cerca de las ciudades, necesario debido al trabajo de los padres.

-Se practica la coeducación,

-Se potenciaba la actividad física, la psicomotricidad como fundamental.

-El juego, a través de él, el niño se socializa, juega con los demás.

-Los deportes, como elemento fundamental.

-Se cultiva la música y el canto.

-Se realizan excursiones, paseos, campamentos, colonias de verano.

-Se concede especial importancia a los trabajos manuales, necesitan aprender de la realidad,”tocar”.

-La conciencia moral y los deberes cívicos, durante mucho tiempo la enseñanza española estuvo vinculada al franquismo.

-Utiliza lo menos posible premios y castigos. El castigo físico era una metodología de trabajo, actualmente no existe, pero se añora.

-Rechaza el formalismo, en la educación debe haber cooperación,

-Rechaza el intelectualismo.

-El alejamiento de la vida, los niños deben aprender a resolver problemas de la vida cotidiana.

-Se centra en las necesidades del niño. Estos autores plantean que la enseñanza básica debe estar centrada en las necesidades del niño.

-Paidocentrismo, el centro de la enseñanza es el niño y sus necesidades. Lo importante es el niño, no nuestro contenido.

-Learning for doing, aprende haciendo, el niño pequeño aprende haciendo, manipulando. Eje de nuestra metodología.

-Implica el respeto a la individualidad, tenemos que respetar los ritmos de aprendizaje, necesidades.

-La escuela debe girar en torno a los intereses del niño.

-Adaptación y flexibilidad, planificas una semana de clase y en función de los intereses deberemos estar adaptando el aula.

-Los intereses deben ser el centro organizador de los contenidos.

-Implica libertad, que cada chico pueda ir tomando sus propias decisiones.

-Autonomía, cada niño aprende de forma autónoma y de forma natural.

-Autoactividad.

sábado, 5 de marzo de 2011

Child Friendly: Familia y Educación Infantil

Este video me ha impactado ya que refleja cómo todos los actos que hacen los adultos, los niños lo imitan. Cómo hemos observado en el video, los niños imitaban todo lo que hacían los adultos, que en el caso del vídeo, eran actos agresivos (gritar, golpear un objeto, coger un cigarrillo…). Pienso que, si muchos adultos cuidaran sus actos delante de los niños y actuaran bien, esto influiría positivamente en el aprendizaje de los niños, ya que éstos imitarían buenas acciones.

Los padres deberían tener especial atención en esto, ya que si en casa tienen un ambiente agresivo, por ejemplo gritan todo el día, dan golpes a las puertas… el niño tenderá a imitarlo, ya que lo ve algo normal en su ambiente familiar, pero en cambio, si el papá trata bien a la mamá, la cuida y la ayuda, el niño ayudará a sus padres y los tratará bien porque es a lo que está acostumbrado a ver. Creo que en la educación de los hijos influye mucho y es un factor muy importante el ambiente que tengan en casa, en el colegio, con el resto de la familia, por lo que cuanto más actos buenos hagan los adultos, los niños los “absorberán”.

Este video me ha recordado al aprendizaje observacional de Albert Bandura, estudiado en Psicología del Desarrollo, el cuál consistía en la observación de la conducta del otro. Bandura realizó un experimento sobre el aprendizaje y la agresión. Puso a un grupo de niños una película dónde salían adultos golpeando a un muñeco, después metió a cada niño en una habitación con un muñeco. La reacción fue, que los niños que habían visto la película empezaron a golpear al muñeco, imitando la conducta que habían visto en el video. Los que no vieron la película, no mostraron ninguna de las conductas agresivas del adulto. Llegó a la conclusión de que los niños aprenden conductas agresivas por la pura observación de los demás.


http://www.youtube.com/watch?v=L11s56ALon0&feature=player_embedded

El Estado Social y el Estado Liberal

El Estado Social

El Estado Social encarna la idea del constitucionalismo social de que sólo puede conseguirse un ejercicio eficaz de los derechos de los ciudadanos mediante la garantía, por parte del Estado, de condiciones mínimas de existencia material del individuo. Este nuevo enfoque del Estado comporta la reivindicación y tutela de los grupos socioeconómicos más débiles y el desarrollo del pluralismo como instrumento de expresión de las demandas sociales y de control sobre los órganos de poder. La transformación del Estado Liberal en Estado Social que tuvo lugar en las sociedades industrializadas del siglo XX, comporta un desplazamiento del énfasis en la libertad jurídico-política como poder legalizado de resistir al poder político, hacia la igualdad social. La época contemporánea es la época de un progresivo avance del principio socialista de la igualdad a través de la protesta obrera. Las diferencias económicas, sociales o políticas comenzaron a ser percibidas como ilegítimas.

El Estado Social es un Estado constitucional que incorpora nuevos derechos de carácter social y garantías por parte del Estado para el cumplimiento de esos derechos. Así, corresponde al Estado promover las condiciones para que la libertad y la igualdad de los individuos sean reales y efectivas, remover los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud y facilitar la participación de los ciudadanos en la vida política, económica, social y cultural. El Estado Social es un Estado democrático y es un Estado pluralista.

El Estado Liberal

El Estado Liberal o Estado de Derecho hace referencia a un conjunto de elementos que configuran un orden jurídico-político en el cual, con el fin de garantizar los derechos de los ciudadanos, se somete la actuación de los poderes públicos y de los ciudadanos a la Constitución y a la ley; se dividen las funciones del Estado y se las encomienda a poderes separados, y por último, se reconocen expresamente unos derechos y libertades de los ciudadanos con plenas garantías jurídicas.

viernes, 4 de marzo de 2011

Sindrome de Alienación Parental

Al realizar la investigación sobre el síndrome del emperador, encontré otro síndrome conocido como de alienación parental que me pareció interesante, por lo que también he investigado sobre éste de forma voluntaria.

Se denomina Síndrome de Alienación Parental (SAP), al conjunto de síntomas que resultan del proceso por el cual un progenitor, mediante distintas estrategias dañinas y poco humanas, transforma la conciencia de sus hijos con objeto de impedir, obstaculizar o destruir sus vínculos con el otro progenitor, hasta hacerla contradictoria con lo que se esperaría de su condición.

Habitualmente es un fenómeno desencadenado por uno de los progenitores respecto al otro.

Señalan que el SAP suele darse fundamentalmente en niños preadolescentes, de entre 9 y 12 años, aunque puede ser probable su aparición en otras edades e indistintamente en hijos e hijas. También, una de cada cuatro hijos, cuyos padres se encuentran en proceso de divorcio contencioso por su custodia, lo padece.

Señalan además otra serie de circunstancias influyentes en el desarrollo del síndrome, como la vulnerabilidad psicológica del niño o los conflictos entre ambos padres. “ Con frecuencia, suele ocurrir que el niño no sólo llegue a rechazar a su padre, sino también a toda la familia y al entorno de éste”, aclara la psicóloga Rosario Cortés.

Los niños que sufren este maltrato quedan totalmente indefensos e incapacitados para ayudarse a sí mismos. Sólo pueden esperar que los adultos lleguen a resolver el problema para liberarse de esta pesadilla. Si el problema entre los adultos no se resuelve, el niño queda abandonado y crece con pensamientos disfuncionales. No es únicamente cuestión de que el niño pueda no llegar jamás a establecer relaciones positivas con el padre/madre alejado, sino que sus propios procesos de razonamiento han sido interrumpidos, coaccionados y dirigidos hacia patrones patológicos.

Los menores que sufren esto, relacionan sus frustraciones con los pensamientos o recuerdos asociados al progenitor alienado, y por tanto desarrollan conforme van creciendo, una tendencia a proyectar toda su negatividad psicológica sobre la imagen que tienen de tal progenitor, lo que termina por destruir tal imagen y a la larga la relación. Para ello, el progenitor alienante, saca a colación la persona del alienado, sólo en los momentos en que el menor sufre alguna frustración; lo hacen sistemáticamente, es decir, en todas las ocasiones posibles antes explicadas, al tiempo que omiten toda referencia a la misma persona, sistemáticamente en todos los momentos en que el niño esté de buen ánimo.

Esta polarización de frustraciones que asocia toda la negatividad mental del menor con su progenitor alienado o su imagen, es dirigida por manipulación consciente del alienante, sirviéndose de su prevalencia sobre el niño/niña. Este no podrá comprender esta circunstancia, ni llegará a racionalizarla para superarlo o no actuar bajo su influjo, ni llegará a ver clara su trascendencia biográfica, aunque se le explicase y demostrase con hechos, datos, y con razonamientos objetivos y lógicos, incluso por terceras personas imparciales, hasta una edad adulta muy avanzada.

Se ha aceptado ampliamente que los patrones de maltrato o abuso físico no podrán ser desarraigados hasta que el sujeto no realice una elección consciente. Así encontramos que los patrones de abuso emocional y psicológico serán transmitidos también de una generación a otra.
Gardner distingue tres grados de SAP: leve, moderado y agudo, aconsejando diversas formas de actuación para cada uno de ellos y destacando la importancia de distinguir en qué caso se está actuando.

Síndrome del emperador

La mayoría de los expertos comparten la teoría de que los niños que maltratan a sus padres, lo que se conoce como “síndrome del emperador” es fruto de carencias educativas o intervienen factores psicopáticos, pero otros sostienen que los factores educativos no explican todos los casos.
Vicente Garrido, psicólogo criminalista y autor de “Los hijos tiranos: el síndrome del emperador”, excluye de este síndrome a los niños que han vivido episodios de violencia doméstica, los que sufren esquizofrenia y también los malcriados, "que tienen conciencia (los valores y creencias que utilizamos para guiar nuestro comportamiento y que está basado en esas emociones)”.

El factor clave a tener en cuenta para saber si hay algo más que carencias educativas es, según Garrido, si aparecen o no rasgos de personalidad psicopática, básicamente insensibilidad emocional, falta de conciencia, falta de empatía y ausencia de culpa. Cuanto más grande sea ese núcleo, mayor será la capacidad de violencia del niño.

La personalidad es difícil de cambiar, pero no el autocontrol, afirma. Hay niños con bajas puntuaciones en humanidad, insensibilidad emocional y empatía, pero no son violentos porque han aprendido a autocontrolarse. Lo que se puede cambiar es la conducta.

Razones:
¿Qué puede ocurrir en la personalidad de un niño para que llegue a agredir a sus padres? Los expertos señalan innumerables causas genéticas, familiares y ambientales que ayuden al desarrollo de este síndrome.

Carlos Peiró, psicólogo de la Unidad de Orientación a la Familia de la Comunidad de Madrid, menciona, entre ellas, "el abandono de las funciones familiares, la sobreprotección y sobre exigencia simultáneas, los hábitos familiares determinados por la escasez de tiempo, la ausencia de autoridad, la permisividad y, sobre todo, la falta de elementos afectivos, como la calidez en la relación con los hijos. Se les educa más en otros entornos sociales que en la familia, algo que no ocurría hace tan sólo una década".

Sin embargo, para otros expertos, aspectos familiares o sociales, como la permisividad o la ausencia de autoridad, no son suficientes para explicar este fenómeno. Así lo cree Garrido.

"Un padre excesivamente permisivo tiene como resultado un hijo caprichoso e irresponsable, pero no un hijo violento. La permisividad puede echar a perder a un niño (hacerse vago, juntarse con malas compañías, cometer delitos), pero si hay violencia es como resultado de un proceso de deterioro personal por falta de educación, generalmente al final de la adolescencia", explicó.

Para él, la clave está en que estos niños "son incapaces de desarrollar emociones morales (como la empatía, el amor o la compasión), lo que se traduce en dificultad para mostrar culpa y arrepentimiento sincero por las malas acciones".

Por ello, asegura que el "síndrome del emperador" tiene causas tanto biológicas (dificultad para desarrollar emociones morales y conciencia) como sociológicas, ya que, en la actualidad, se desprestigia el sentimiento de culpa y se alienta la gratificación inmediata y el hedonismo.

"La familia y la escuela han perdido la capacidad de educación, y esto favorece que chicos con esta predisposición, que antes eran mantenidos por la sociedad, ahora tengan mucha más facilidad para exhibir la violencia".

La importancia de los medios en este factor es clave: "La televisión enseña valores muy hedonistas y consumistas -apunta Garrido-, y dificulta el aprendizaje del autocontrol, es decir, la capacidad de esforzarse por renunciar a cosas inadecuadas y para perseguir metas que requieren esfuerzos. Los hijos tiranos ven en los medios muchas conductas y metas que son coincidentes con lo que ellos desean: pasarlo bien y hacer lo que quieran sin que nadie les obstaculice".

Lo que para muchos es una falta de disciplina que se soluciona con un "cachete a tiempo", es, sin embargo, un problema mucho más profundo que exige "ayudar a que el niño desarrolle una conciencia sólida; ésta es la mejor policía. Y ello se logra aplicando castigos razonables, pero firmes, y explicando las razones morales y prácticas que supone su mala acción. En los casos más graves es, por desgracia, casi imposible", lamenta Garrido.

Las madres, principales víctimas.
Los escasos estudios realizados en España sobre este fenómeno no permiten elaborar un perfil exacto de las familias que acogen a un niño o joven con el "síndrome del emperador". Sin embargo, los expertos coinciden en una mayor incidencia en las familias monoparentales.

"La mayoría de los casos se da en madres que vuelven a tener otra pareja", explica Luis González Cieza. Asegura que la madre es la víctima en el 87% de las ocasiones que se produce este tipo de violencia, y que principalmente recibe agresiones físicas, aunque también son habituales las verbales. En el 13.8% de los casos, el estudio refleja que la intimidación se produjo con un cuchillo o un arma similar.

González Geza añade que la edad media de los menores denunciados por este tipo de violencia es inferior a la de otros delitos. Mientras que en estos últimos es de 17.5 años, en el "síndrome del emperador" es de 16 años. Sus protagonistas, además, no suelen tener historial delictivo.

Una última característica es que esta violencia familiar tiene una incidencia sensiblemente superior en hijos adoptados frente a los biológicos.

El efecto pigmalión

El Efecto Pigmalión tiene su origen en un mito griego consistente en un escultor llamado Pigmalión que se enamoró de una de sus creaciones: Galatea. A tal punto llegó su pasión por la escultura que la trataba como si fuera una mujer real, como si estuviera viva. El mito continúa cuando la escultura cobra vida después de un sueño de Pigmalión, por obra de Afrodita al ver el amor que éste sentía por la estatua, que representaba a la mujer de sus sueños.
El efecto pigmalión o también conocido como profecía autorrealizada. Es uno de los sucesos que, tanto en el ámbito laboral como en el escolar, social y familiar, pueden ser más productivos o contraproducentes. Esto supone, por tanto, algo importante de conocer y estudiar para los profesionales de cualquier ámbito.

El efecto pigmalión se puede identificar de las siguientes maneras:
1. Suceso por el que una persona consigue lo que se proponía previamente a causa de la creencia de que puede conseguirlo.

2. "Las expectativas y previsiones de los profesores sobre la forma en que de alguna manera se conduciría a los alumnos, determinan precisamente las conductas que los profesores esperaban." (Rosenthal y Jacobson).

3. Una profecía autocumplida es una expectativa que incita a las personas a actuar en formas que hacen que la expectativa se vuelva cierta.

Como he mencionado anteriormente, esto puede afectar tanto en el ámbito laboral, social,familiar y escolar. A continuación me voy a centrar en el ámbito educativo, ya que es el que más nos interesa.

Rosenthal y Jacobson estudian el efecto Pigmalión desde la perspectiva de la teoría de la profecía autorrealizada. Esta teoría la entendemos como uno de los factores que influyen en la motivación de los alumnos en el aula. Aparentemente parece que es un efecto mágico, pero no lo es, lo que ocurre es que los profesores formulan expectativas acerca del comportamiento en clase de diferentes alumnos y los van a tratar de forma distinta de acuerdo con dichas expectativas. Es posible que a los alumnos que ellos consideran más capacitados les den más y mayores estímulos, más tiempo para sus respuestas, etc. Estos alumnos, al ser tratados de un modo distinto, responden de manera diferente, confirmando así las expectativas de los profesores y proporcionando las respuestas acertadas con más frecuencia. Si esto se hace de una forma continuada a lo largo de varios meses, conseguirán mejores resultados escolares y mejores calificaciones en los exámenes.

Existen dos tipos de efectos:

- Efecto pigmalión positivo: El efecto pigmalión positivo se refiere a aquel que produce un efecto positivo en el sujeto, de forma que afianza el aspecto sobre el cual se produce el efecto, provocando un aumento de la autoestima del sujeto y del aspecto en concreto.

- Efecto pigmalión negativo: El efecto pigmalión negativo es aquel que produce que la autoestima del sujeto disminuya y que el aspecto sobre el que se actúa disminuya o incluso desaparezca.

Teoría de las necesidades humanas de Abraham Maslow